6 dic. 2005

Lo Dicho y Lo Cierto III


Algunas veces nosotros también hacemos planes de fines de semana romanti- cones por dos motivos: Por mostrar que seguimos teniendo interés en su bienestar emocional, que queremos que se sientan amadas, deseadas... en fin, unas diosas; y porque simplemente somos así. A veces nos provoca hacer estas cosas, pero no tan seguido como nuestras marinovias quisieran. Además, si esto se hiciera siempre, dejaría de sentirse tan especial. Por ejemplo, si regalas unas flores un día normal, ellas se sienten queridas y recordadas, pero si le das flores como si fueran parte de su dieta diaria, estas no serán recibidas con la misma alegría.

Regresando al tema, llega el fin de semana esperado. Los preparativos comenzaron desde la reservación de un hotel simpático el fin de semana, te aseguras de tener el licor perfecto, uno de esos dulcetes que les encanta y nosotros nos embotamos antes de sentirnos adormecidos. Un recipiente con su fruta favorita a la hora de la calistenia sexual, la ropa que a ella le gusta que uses, la pijama de piel previa preparada en el gim y dieta de alimentos y de laxantes potentes para estar lo más flacos posibles y así no partirles la columna en el acto amoroso. Un sinfín de detalles que uno no se imagina, sacados pacientemente en el tiempo mediante preguntas muy discretas a tu marinovia y a sus amigas sobre las cosas mas ocultas y cursis que no puedes ni imaginar.
Cuando llega el día sólo pueden pasar dos cosas:

PASARLO BIEN

Llegar a la habitación, que tu marinovia te mire con ojos brillosos y te diga que te ama y luego te bese tiernamente hasta que esos besos poco a poco se trasformen el locura y que termines en la cama pidiendo no un simple cigarrillo, sino un Montecristo o un Cohiba de la reserva privada de Fidel, para que se comparen un poco al inmenso placer y viaje al cielo ida y vuelta.

Pero... ¿qué pasa cuando no es así? Un par de horas antes de salir te dicen:

"Amorcito, hoy salimos con mi amiga Cuchita ya que es su cumpleaños, además ya quedé con ellos."

Lo Dicho:

"Pero amor, ¿y nuestro fin de semana?"

Lo Cierto:

"Carajo, por la puta madre. ¡¿Tanto tiempo que has venido jodiendo con esto y ahora cuando todo está hecho lo cancelas?! ¡¿Qué mierda tienes en la cabeza?!

Ella replica:

"Ah, tienes razón. Entonces, ¿qué te parece si vamos, lo hacemos al toque y luego nos vamos con mis amigas?"

Lo dicho:

"Amorcito, ten en cuenta lo lejos que queda y todo eso, además yo no he hecho todo esto por las puras."

Lo cierto:

"A mí qué chucha tu amiga, me has hecho chambear como mierda para que tengas tu fin de semana de fantasía y ahora quieres que con todo eso tengamos un "quicky"? ¡Ese te lo mando en el baño de tu amiga!

Bueno, las cosas se calman. Ella llama a su amiga, se disculpa y le da una excusa más tonta que la de "el perro se comió mi tarea". Llegas con ella al cuarto de sus sueños y ella corre a la cama. Se pone su pijama, se mete a la cama, prende la tele y ni te mira. Uno ya sabe que algo pasará, va a ser un fin de semana de temer. Te pones más comodo y le ofreces una copa. Ella la recibe y se la toma como agua. Deja la copa y dice:

"Gracias."

sin siquiera mirarte. La tocas y te dice:

"Ay, ¡tienes las manos frías!"

La besas, y te dice:

"Mejor aféitate, tu barba raspa."

Una vez que complaces sus caprichos estás con las manos calientes y tu cara tiene la textura de un poto de bebe. Regresas al cuarto y...

ella se hace la dormida.

Saltas en la cama haciendo la del tigre y te esquiva con una habilidad felina. Conversan un rato, ella no es de piedra, y las cosas pasan. Sin embargo, no fue con el jugueteo que tuviste en mente todo el tiempo que realizabas los preparativos, parece un robot cuya misión se limita a que no tengas "blue balls" y punto. Luego ella te dice:

"¡Qué egoísta eres! ¡Nunca piensas en las necesidades de mi alma!"

y empieza a llorar.

Las mujeres son unos seres mágicos y bellos pero algunas veces me hacen pensar que están en este mundo sólo para torturar al sexo masculino.

Fotografía: Nicco.

11 comentarios:

Roger dijo...

no falla, siempre acabamos siendo unos terribles egoistas.

Roger dijo...

no falla, siempre acabamos siendo unos terribles egoistas.

Anónimo dijo...

eso es porque usted siempre se está repitiendo

Anónimo dijo...

oIGAN HAY MARINOVIAS QUE SI VALORAMOS ESE TIPO DE COSAS... Y SI YA HABIAN QUEDADO EN FUGA DE FIN DE SEMANA POR LO MENOS YO NO LO CANCELARIA POR UN CUMPLE DE UNA AMIGA... SIGUE ASI OJALA Y LE ATINES A LAS NECESIDADES DE TU MARINOVIA =)

Anónimo dijo...

Ojalá le atines a una mejor marinovia, compadre.

Danza Invisible, ¡avisa nomás!

Maryorie Nin dijo...

Ay, mi madre...

Man Ray dijo...

Asu. Si a todos les pasa...

¿me siento mejor?

MamiBrujita dijo...

Yo tampoco tirarria por la borda un fin de semana asi. Si mi marinovio planeara uno de esos.... Creo que hay chicos a los que les falta ese tipo de iniciativa.

YannyRamz .- dijo...

Tanto tiempo sin venirme a reir un poco:-p
Jaja, vaya vaya.
Yo por lo contrario, le hago la vida imposible a mi novio [ sin querer ] y luego que se enoja conmigo, quiero jugar con el. WOw.
Seria realmente lo contrario, o igualito?

Herr Hauptmann dijo...

Por lo menos que avisen con anticipación, ¿no?.
Aunque a veces factores exógenos (se murió el abuelito, inundación en tu casa, te cayeron paracaidístas, etc.) se confluyen para estropear el perfecto fin de semana que habías estado planeando.

Anónimo dijo...

Ingao, yo me acuerdo de un finde fantástico que estuve planeando con todo detalle y con todo esmero y el viernes en la tarde recibo una llamada: "Favor de presentarse el día de mañana a la hora tal en tal lugar pues se estarán entregando las plazas de los solicitantes que fueron admitidos. El tramite será personal". Iwawa, yo había estado viviendo de contratos Y SE LES OCURRE DARME LA PLAZA ESE MISMO DÍA. Bueno, lo platicamos en la noche y al otro día fuimos juntos a lo de las plazas y en eso se nos fue TODO EL INCHE DÍA. Valió la pena, pero en ese rato yo quería mandar al cuerno la plaza. Quería decirles que el perro se comió mi título y estaba tramitando un duplicado, pero ni siquiera sé si existen los duplicados de títulos. Y la ingrata que no dejaba de darme besitos y yo que me la quería comer alli mismo. Hijuesu, es que andaba bien cargado y había estado acumulando fuerzas para ese día. Lo bueno es que el domingo nos desquitamos. Saludos.